Júpiter y Plutón se juntan como buenos amigos cada doce años y medio aproximadamente, haciendo una conjunción, pero en el año 2020 no hicieron una o dos sino tres conjunciones en el signo de Capricornio dejando impreso su sello en todo lo vivido y aprendido a lo largo de estos meses. La primera tuvo lugar en abril en el grado 24°, para junio con ambos planetas retrógrados en el grado 24° hubo una segunda y hoy en el grado 22° harán su última conjunción la cual es poderosa porque es el remate final, por lo tanto como dicen por allí viene con todo.
En una conjunción la energía de ambos planetas se mezclan, se funden y trabajan en un área específica, bailan el ritmo particular que establece el signo donde se encuentren, en esta ocasión ambos planetas se hayan en Capricornio determinando que deben moverse estructuras, patrones rígidos que hasta ahora nos acompañaron, la norma establecida y seguida, el statu quo que a nivel individual y colectivo sustentaba nuestra visión y actuar en la vida.
Por otro lado Júpiter es el planeta que rige nuestra filosofía de vida, la manera de mirar al mundo, el planeta de la abundancia, de la prosperidad, de la expansión, la exageración el que genera confianza y nos hace mirar más allá de lo que vemos de cerca, por eso también Júpiter representa los viajes largos y conocer otras culturas, la educación superior, el comercio internacional, la comunicación de uno para muchos. Plutón por su parte, representa la transformación, la muerte, la desconstrucción no le importa que tanto nos duela, para este planeta nada queda en la superficie va a lo profundo y nos pone cara a cara con nuestros temores para luego resurgir como el ave fénix . Júpiter es un planeta social y Plutón un planeta transpersonal por lo tanto el trabajo de Plutón no se queda solo en transformar la realidad individual y social va más allá, a una realidad mayor de inspiración, conocimiento, intuición que se funde con el colectivo y nos arrastra a evolucionar como humanidad.
La conjunción de Júpiter y Plutón representa la demolición de la visión que teníamos con respecto a ideologías, culturas y creencias. Nos señala que debemos cambiar de anteojos para adaptarnos a lo nuevo, que debemos asumir perdidas pero conservar nuestro núcleo para avanzar más allá de los horizontes que nos son conocidos. Júpiter es el regente de Sagitario y es allí donde se encuentra el Nodo Sur de la Luna, por lo que nos recuerda que son los aspectos Jupiterianos que debemos cambiar o excluir en favor de nuestra evolución, veremos a lo largo de este nuevo ciclo que muchos de los que se encuentran ahora en el Poder ya deben ser sustituidos, incluso naciones que hasta ahora han dirigido el colectivo mundial deben ceder y dar espacio a otras, maestros, guías y religiones caerán o verán sus credos enfocados con una nueva orientación, los viajes a larga distancia que ya comenzaron a modificarse con el Covid-19 permanecerán algo restringido, no tendrán la apertura como hasta ahora lo conocimos porque tendremos nuevos lineamientos que con pandemía o sin pandemía estarán allí.
Veremos la gente volcada a trabajar su crecimiento personal con una visión más holística de la vida, los cambios sutiles que ha venido experimentando la educación a nivel superior por el distanciamiento social se van a ir acentuando, puliendo y mejorando, todo el campo tecnológico tendrá una expansión enorme. Con esta conjunción más a mediano plazo el falso optimismo tocará tierra y tomando en consideración que Júpiter y Plutón representan riquezas, recursos y poder no duden que las finanzas estas se expandirán de forma diferente, y seguramente el poder que sostiene ahora el monopolio económico pasará de unas manos a otras.
Bendiciones.


